En el estado de Kentucky, un hombre que portaba un rifle de asalto semiautomático estilo AR-15 mató, el lunes por la mañana, a cinco personas en un banco del centro de la ciudad de Louisville. Otras ocho personas resultaron heridas en el ataque, incluido un oficial de policía que recibió un disparo en la cabeza y requirió cirugía cerebral. La policía de Louisville dice que respondió al “ataque” dentro de los tres minutos de haber sido informada y dio de baja al atacante en un intercambio de disparos. Los investigadores identificaron al atacante como un empleado del banco Old National Bank de 25 años y aseguran que estaba transmitiendo en las redes sociales en vivo mientras atacaba a sus compañeros de trabajo. El gobernador demócrata de Kentucky, Andy Beshear, dijo que tres de sus amigos cercanos se encontraban entre las víctimas, incluido el vicepresidente del banco, Thomas Elliott, quien por muchos años fue un donante del Partido Demócrata.
Gobernador Andy Beshear: “Esto es horrible. Tengo un amigo muy cercano que hoy no sobrevivió. Tengo otro amigo cercano que tampoco sobrevivió, y uno que está en el hospital y espero que se recupere”.
Solo dos horas después del tiroteo masivo ocurrido el lunes en Louisville, una persona murió y otra resultó herida en un instituto público de formación superior que se encuentra a unos tres kilómetros de distancia. Según la organización Gun Violence Archive, ha habido 146 tiroteos masivos en Estados Unidos en 2023. Estos actos de violencia volvieron a poner el foco en los esfuerzos de los republicanos para flexibilizar aún más las regulaciones sobre las armas de fuego, incluido el del congresista del estado de Kentucky Thomas Massie, cuyo distrito incluye partes de los suburbios de Louisville. En 2021, Massie publicó en Twitter una foto en la que él y seis miembros de su familia aparecen sosteniendo rifles de asalto y con el mensaje de “¡Feliz Navidad! Posdata: Santa, por favor, trae municiones”.
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