En Estados Unidos, la empresa SpaceX declaró exitoso el primer lanzamiento de su gigantesco nuevo cohete conocido como “Starship”. El prototipo de dos etapas despegó el jueves por la mañana desde la extensa base que SpaceX posee en la costa de Texas, cerca de la frontera de Estados Unidos con México, y se convirtió en la máquina más grande y pesada que jamás haya volado por sus propios medios. Al menos seis de los 33 motores del cohete fallaron durante el vuelo y el vehículo se autodestruyó sobre el golfo de México unos cuatro minutos después del despegue. Los residentes de la ciudad de Port Isabel, ubicada cerca del lugar desde donde se realizó el lanzamiento, informaron que cayeron partículas del cohete sobre sus vecindarios. Esta fue la última de una serie de explosiones que se han producido en los alrededores del lugar de lanzamiento de SpaceX, el cual se encuentra ubicado cerca del Refugio Nacional de Vida Silvestre del Valle Bajo del Río Grande.
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