El líder de la junta militar de Sudán ha descartado poner fin en un corto plazo a meses de enfrentamientos con el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido, a quienes calificó de “traidores” en un discurso que pronunció para los soldados. El general Abdel Fattah al-Burhan hizo estas declaraciones el lunes, después de que el jefe del grupo paramilitar dijera que estaba abierto a acordar un alto el fuego a largo plazo y negociar el fin de la crisis que azota el país. Esto se produce al tiempo que las Naciones Unidas advierten que los niños y niñas de Sudán padecen una grave desnutrición. Según un portavoz de la ONU, los combates han obligado a más de 3,6 millones de personas a desplazarse a otras partes del país, mientras que aproximadamente un millón han huido a otros países.
Jens Laerke: “Cuanto más se prolonguen estos combates, más devastadoras serán sus repercusiones. Cientos de miles de niños y niñas están gravemente desnutridos y corren un riesgo inminente de muerte si no reciben tratamiento. Otros millones de niños y niñas verán su educación sustituida por los devastadores traumas de la guerra, y se convertirán en una generación perdida”