En Colombia, la Jurisdicción Especial para la Paz declaró al general Mario Montoya, entrenado en Estados Unidos, responsable de 130 ejecuciones extrajudiciales y desapariciones entre 2002 y 2003. Montoya está acusado de clasificar deliberadamente como “combatientes enemigos” a civiles que murieron a manos de militares a su cargo, un hecho que fue conocido como el escándalo de los “falsos positivos”. Más de 6.000 civiles, entre ellos menores de edad y personas discapacitadas, murieron a manos de las fuerzas armadas de Colombia entre 2002 y 2008, que luego clasificaron a sus víctimas como combatientes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, o FARC.
Temas: