El Ejército israelí ha llevado a cabo otra importante incursión militar en el hospital Al-Shifa de la ciudad de Gaza. Según se informa, francotiradores israelíes están disparando contra personas dentro del hospital, que también ha sido atacado con tanques y drones. Funcionarios de salud palestinos afirman que unas 30.000 personas se encuentran refugiadas en el hospital. Por su parte, Israel sostuvo que el objetivo del operativo es atacar combatientes de la organización Hamás. Al menos 80 palestinos han sido detenidos en el hospital, incluido el corresponsal de la cadena Al Jazeera Ismail al-Ghoul.
Esto se produce al tiempo que la Agencia de Naciones Unidas para la Población Refugiada de Palestina informa que, en el norte de la Franja de Gaza, uno de cada tres niños y niñas menores de dos años sufre desnutrición debido a que Israel continúa bloqueando la entrada de ayuda humanitaria al enclave palestino. La directora ejecutiva de Unicef, Catherine Russell, dijo que “la rapidez con la que ha evolucionado esta catastrófica crisis de desnutrición infantil en Gaza es estremecedora, especialmente cuando la ayuda que se necesita desesperadamente ha estado disponible a tan solo unos kilómetros de distancia”.
Un barco con ayuda humanitaria que zarpó desde Chipre llegó el viernes a la Franja de Gaza. Si bien la embarcación transportó 200 toneladas de ayuda humanitaria hasta el enclave palestino, organizaciones humanitarias afirman que se necesita de manera desesperada que se distribuya mucha más ayuda. Muchas madres palestinas dicen que no tienen nada con qué alimentar a sus hijos e hijas.
Hala Ashraf Deeb: “¿Qué ha hecho este niño para pasar hambre? No puedo conseguir leche por cinco séqueles ni una caja de leche en la agencia. Allí, la leche normal cuesta unos 150. No hay trabajo. No hay comida ni bebidas. Estamos comiendo plantas. Empezamos a comer comida para palomas, comida para burros. Somos como animales”.
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