
Este fin de semana se cumplió el primer aniversario de la muerte de la activista turca-estadounidense Ayşenur Ezgi Eygi. Las fuerzas israelíes mataron a Eygi cuando participaba en una manifestación semanal no violenta contra los asentamientos ilegales israelíes en el territorio ocupado de Cisjordania. Su muerte está siendo investigada por el Gobierno turco pero, a pesar de las solicitudes de la familia de Eygi, Estados Unidos se sigue negando a realizar su propia investigación independiente. Desde 2022, soldados y colonos israelíes han matado al menos a diez personas con ciudadanía estadounidense, dos de ellas en el año transcurrido desde la muerte de Eygi. En ninguno de los casos se han presentado cargos penales. “No ha habido ningún avance, realmente ninguna comunicación, ninguna voluntad política, […] ninguna medida significativa para obtener justicia y rendición de cuentas por [la muerte de] mi hermana”, dice Ozden Bennett, quien cuenta que la muerte de su hermana fue “fácilmente el momento más horrible e impactante de mi vida”.
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