El autodenominado Estado Islámico (ISIS) habría solidificado su control sobre la ciudad iraquí clave de Ramadi, tras tomarla de manos de las fuerzas iraquíes el domingo pasado. Hubo informes de que los milicianos arrojaron cuerpos al río Éufrates. Por su parte, miles de milicianos chiíes iraníes se estarían alineando al este de Ramadi en un intento de ayudar a recuperar la ciudad, mientras que Estados Unidos lanza ataques aéreos. El portavoz del departamento de Estado, Jeff Rathke, reconoció que la pérdida de Ramadi fue un retroceso, pero prometió que el apoyo de Estados Unidos continuará.
Rathke expresó: “Siempre supimos que la lucha sería larga y difícil, sobre todo en la provincia de Ámbar. Y no se puede negar que esto es un retroceso, pero Estados Unidos seguirá ayudando a los iraquíes a recuperar Ramadi. A partir de hoy, estamos apoyando a las fuerzas de seguridad iraquíes y al gobierno de Irak con ataques aéreos precisos y asesoramiento al ejército iraquí. Nuestros aviones están en el aire buscando objetivos de ISIS y seguiremos haciéndolo hasta que Ramadi sea recuperada”.