En Turquía, se estima que 25.000 refugiados y solicitantes de asilo, muchos de ellos procedentes de Siria, se han congregado en la frontera con Grecia, después de que las autoridades turcas pusieran fin a un acuerdo de 2016 para impedirles entrar en la Unión Europea. El miércoles, la policía antidisturbios griega disparó gases lacrimógenos, cañones de agua y balas “menos letales” a lo largo de una valla fronteriza contra una multitud de solicitantes de asilo que esperaban llegar a la Unión Europea. Las autoridades turcas afirman que seis solicitantes de asilo resultaron heridos después de que la policía abriera fuego con munición real, y que uno de ellos murió más tarde a causa de las heridas. Otros refugiados detenidos por la policía griega declararon que los descalzaron y les sacaron sus chaquetas y que fueron severamente golpeados. El Gobierno griego negó las denuncias, calificándolas de “noticias falsas”.
Turquía acusa a Grecia de matar a un migrante mientras la policía antidisturbios griega dispara gases lacrimógenos en la frontera
Titular05 Mar. 2020