La Convención Nacional Republicana fue trasladada a la ciudad de Jacksonville, en el estado de Florida, luego de que Donald Trump decidiera no realizarla en el estado de Carolina del Norte, donde el gobernador Roy Cooper se negó a permitir un estadio repleto de personas durante la pandemia. El alcalde republicano de Jacksonville, Lenny Curry, dijo que planean llenar un estadio, aunque sigue siendo incierta la manera en que la ciudad alojará a los visitantes que lleguen para la convención. En 2005, cuando Jacksonville fue sede del Super Bowl, el partido final de la Liga Nacional de Fútbol Americano, fue necesario llevar cruceros a la ciudad para hospedar a los visitantes.
Trump aceptará la nominación republicana el 27 de agosto, fecha que coincide con el sexagésimo aniversario de uno de los días más oscuros de la historia de Jacksonville. El 27 de agosto de 1960, el Ku Klux Klan organizó a un grupo de blancos, muchos de ellos armados con mangos de hachas, para atacar a manifestantes afroestadounidenses defensores de los derechos civiles que intentaban lograr la abolición de la segregación en una cafetería para blancos. Ese día pasó a conocerse como Ax Handle Saturday, o sábado de los mangos de hacha. La semana pasada, durante la noche, la ciudad retiró discretamente una estatua confederada de la plaza en que se llevará a cabo una conmemoración, a menos de dos kilómetros de distancia de la convención.