En la ciudad de Portland, en el estado de Oregón, la Policía arrestó a nueve personas el jueves por la mañana después de declarar que su campamento de protesta cerca de un juzgado federal del centro de la ciudad era una “asamblea ilegal”.
La represión contra manifestantes se produjo luego de que el secretario de Seguridad Nacional en funciones, Chad Wolf, acusara a los oficiales de Portland de no haber sido capaces de restablecer el orden público durante las siete semanas de protestas que estallaron tras el asesinato de George Floyd. Durante una visita a Portland el jueves, Wolf calificó a los manifestantes del movimiento Black Lives Matter como “anarquistas sin ley” y una “muchedumbre violenta” que profanó y destruyó bienes federales.
La gobernadora de Oregón, Kate Brown, le respondió en Twitter, donde escribió: “Este teatro político del presidente Trump no tiene nada que ver con la seguridad pública. El presidente no está liderando esta nación. Ahora está desplegando oficiales federales para patrullar las calles de Portland en un flagrante abuso de poder por parte del Gobierno federal”.
Videos que circulan en las redes sociales muestran a agentes federales fuertemente armados sin identificación de ninguna agencia, recogiendo a manifestantes de las calles de Portland y obligandolos a subir a automóviles que no tienen ninguna identificación oficial. La cadena pública de radio y televisión de Oregon informa que un manifestante salió corriendo cuando vio a personas vestidas de camuflaje saltar de un vehículo sin identificación oficial, por no saber si estaba siendo arrestado o secuestrado.
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