El presidente de Guinea-Bissau dijo que sobrevivió a un intento de golpe de Estado, pero que “muchos” miembros de sus fuerzas de seguridad murieron cuando hombres armados intentaron matarlo a él y a miembros del gabinete en el palacio de Gobierno. Los medios locales informaron de al menos seis muertes relacionadas con el ataque. El presidente Umaro Cissoko Embaló, exgeneral del Ejército, afirmó que el ataque estaba vinculado con el narcotráfico, aunque los detalles de lo sucedido aún no están claros. Embaló asumió el cargo en febrero de 2020 después de una elección cuyo resultado final fue puesto en duda por acusaciones de fraude. Desde que se independizó de Portugal en 1974, Guinea-Bissau ha sufrido varios golpes militares o intentos de toma del poder por medio de un golpe de Estado militar. El ataque del martes fue el último de una serie de golpes o intentos de golpe en África Occidental. El secretario general de la ONU alertó este martes sobre la creciente inestabilidad en la región.
Secretario general António Guterres: “Estamos viendo una terrible multiplicación de golpes de Estado [en la región]. Instamos a que los militares regresen a los cuarteles y que se restablezca plenamente el orden constitucional en el contexto democrático actual de Guinea Bissau”.
Mientras tanto, la Unión Africana suspendió a Burkina Faso de la organización tras el golpe de Estado militar de la semana pasada en ese país que depuso al presidente Roch Kaboré.