Durante la noche del lunes, Rusia lanzó ataques con misiles y aviones no tripulados contra la capital de Ucrania, Kiev, y el puerto sureño de Odesa. Los ataques aéreos se produjeron después de que Rusia realizó un ataque contra un centro de distribución de ayuda humanitaria en el sureste de Ucrania que se cobró la vida de siete personas. En Rusia, el Kremlin dijo el lunes que el líder de la organización paramilitar Wagner se había reunido el mes pasado con el presidente ruso, Vladimir Putin, en Moscú, solo cinco días después de que sus fuerzas armadas lanzaran una rebelión fallida. El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, dijo que el líder del Grupo Wagner, Yevgeny Prigozhin, formó parte de una reunión de tres horas que se celebró el 29 de junio y en la que participaron unas tres docenas de líderes del Grupo Wagner.
Dmitry Peskov: “Los comandantes dieron su versión de los hechos. Resaltaron el hecho de que son fieles defensores y soldados del jefe de Estado y del comandante en jefe. [Además], dijeron que estaban listos para seguir luchando por su patria”.