Israel continúa bombardeando el Líbano, donde sus fuerzas armadas han matado en lo que va de este viernes al menos a 25 personas, incluidos los nueve miembros de una familia en la localidad fronteriza de Shebaa. Desde el lunes, las fuerzas armadas israelíes han matado a más de 700 personas en el Líbano.
En un aparente cambio de postura, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo el jueves por la noche que está dispuesto a respaldar un acuerdo de alto el fuego temporal liderado por Estados Unidos, aunque no ha tomado ninguna medida para desescalar la ofensiva de Israel contra el Líbano y los funcionarios israelíes han amenazado con lanzar una invasión terrestre en territorio libanés. El ministro de Relaciones Exteriores del Líbano, Abdallah Bou Habib, habló el jueves ante la Asamblea General de la ONU.
Abdallah Bou Habib: “El Líbano está enfrentando una crisis que amenaza su propia existencia. El futuro de nuestro pueblo y nuestra prosperidad están en peligro. Y esta es una situación que requiere intervención internacional urgente, antes de que se salga de control y genere un efecto dominó que haga que la crisis sea imposible de contener”.
La ONU afirma que unas 30.000 personas han huido del Líbano a Siria en los últimos días. Mientras tanto, los medios de comunicación sirios informan que un ataque aéreo que Israel lanzó este viernes desde el territorio ocupado de los Altos del Golán mató a cinco soldados de Siria en la frontera que separa a dicho país del Líbano.