Mientras tanto, el presidente sirio Bashar al Assad negó que sus fuerzas usaran gases tóxicos para atacar Jan Shijun, una ciudad ocupada por los rebeldes en Idlib, donde murieron 87 personas, entre ellas más de 30 niños. En una entrevista grabada el miércoles por la agencia de noticias AFP, Assad dijo que las denuncias del ataque eran “100 %” falsas.
El presidente Bashar al Assad dijo: “No hubo ninguna orden de atacar. No tenemos armas químicas. Renunciamos a nuestro arsenal hace tres años. Incluso aunque las tuviéramos, no las usaríamos. Y nunca, en nuestra historia, usamos nuestro arsenal químico”.
Assad dejó entrever que los niños que se veían en el video del incidente, ampliamente circulado, eran en realidad niños actores que aparentaban estar muertos. La entrevista de Assad se transmitió mientras inspectores de la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas anunciaban el jueves que las muestras que se tomaron en el lugar dieron positivo para el gas nervioso sarín.