Las fuerzas del gobierno sirio continúan atacando el distrito de Guta Oriental, controlado por los rebeldes, dos días después de que el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas respaldara por unanimidad un alto el fuego de 30 días. Según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos, al menos nueve personas han muerto ayer como consecuencia de ataques con artillería en Guta Oriental. Más de 500 personas han muerto en Guta Oriental durante la semana pasada. Mientras tanto, Turquía continúa su ofensiva en la ciudad de Afrin, controlada por los kurdos. El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, instó a todas las partes involucradas a implementar el alto el fuego.
António Guterres declaró: “Guta Oriental no puede esperar, es hora de detener este infierno en la Tierra. Y les recuerdo a todas las partes involucradas su obligación absoluta, en virtud del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos, de proteger a los civiles y la infraestructura civil en todo momento. Y de manera similar, las medidas para combatir el terrorismo no quedan por encima de estas obligaciones”.