El miércoles, el presidente Trump hizo múltiples afirmaciones falsas, sugirió que los demócratas se estaban robando las elecciones. En un momento, Trump declaró en Twitter la victoria en los estados de Pensilvania, Georgia, Carolina del Norte y Michigan, con el propósito de impactar el resultado de las elecciones, pese a que los votos aún se están contando. La campaña de Trump también presentó demandas en los estados de Pensilvania y Michigan y ha solicitado un recuento en Wisconsin. El miércoles, la funcionaria electoral principal de Wisconsin, Meagan Wolfe, dijo que las acusaciones de fraude electoral por parte de Trump eran un insulto a los trabajadores electorales.
Meagan Wolfe: “Todos son bienvenidos a ver ese proceso. Algunos de los lugares incluso transmitieron su recuento en vivo anoche. Por eso, creo que es un insulto para nuestros funcionarios electorales locales decir que cualquier proceso electoral de ayer fue todo menos un éxito increíble”.