Una nueva investigación llevada a cabo por un organismo de supervisión federal reveló que al menos 13 funcionarios del Gobierno de Trump llevaron a cabo actividades ilegales de campaña relacionadas con la reelección del expresidente mientras ocupaban cargos públicos, lo cual constituye una violación de la Ley Hatch (Hatch Act). Algunos de los funcionarios mencionados en el informe incluyen al yerno y asesor principal del expresidente, Jared Kushner, a la consejera Kellyanne Conway, al secretario de Estado Mike Pompeo, al jefe de gabinete Mark Meadows, a la secretaria de Prensa Kayleigh McEnany y al asesor principal Stephen Miller.
Mientras tanto, el comité de la Cámara de Representantes que investiga la insurrección del 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos solicitó formalmente la comparecencia de otros diez exfuncionarios de Trump, incluidos Stephen Miller y Kayleigh McEnany. McEnany hizo varias afirmaciones de que se había cometido fraude electoral, tanto antes como después de las elecciones presidenciales de 2020, incluso durante su primera conferencia de prensa tras la derrota de Trump frente a Joe Biden.
Secretaria de Prensa Kayleigh McEnany: “Se están haciendo reclamos muy creíbles que la campaña está examinando. […] Este sistema, la votación masiva por correo, nunca se había probado en la historia de Estados Unidos. Determinamos que este mecanismo es particularmente propenso al fraude”.
Esto se produce al tiempo que una jueza federal rechazó el martes el último intento de Trump de invocar el “privilegio ejecutivo” para impedir que el comité que investiga los hechos del 6 de enero acceda a documentos relacionados con sus intentos de revocar los resultados electorales. La jueza Tanya Chutkan escribió: “Los presidentes no son reyes y [Trump] no es el presidente”. Se espera que los Archivos Nacionales comiencen a publicar los documentos a partir del viernes.