Las fuerzas de la ocupación de la OTAN en Afganistán, encabezadas por Estados Unidos, suspendieron el entrenamiento de la policía local y de las fuerzas de operaciones especiales afganas tras una ola de constantes ataques contra soldados internacionales. El entrenamiento será suspendido al menos por un mes para eliminar a supuestos infiltrados de grupos militantes. La suspensión no se aplica a las fuerzas afganas a nivel nacional. El Secretario General de la OTAN, Anders Fogh Rasmussen, dijo en Bélgica que los militantes afganos no harán fracasar la misión de las fuerzas de la ocupación en Afganistán.
Anders Fogh Rasmussen declaró: “No se olviden que para el Talibán es imposible ganar militarmente, entonces intentan captar la atención pública al debilitar la seguridad y la confianza entre los soldados extranjeros y las fuerzas de seguridad afganas, de modo que, obviamente no descartaré la posibilidad de que el Talibán intente infiltrarse en las fuerzas de seguridad afganas, pero reitero, no lograrán hacer fracasar nuestra estrategia”.