Un prisionero de Louisiana ha sido liberado luego de pasar treinta años sentenciado a muerte. Glenn Ford salió de la penitenciaría de Angola el martes, después de que un juez anulara su condena a muerte por asesinato. La exoneración de Ford se produjo al surgir nuevas pruebas que descartaban su culpabilidad por el asesinato de 1983 por el que fue condenado. Los detalles se han mantenido en secreto con el fin de enjuiciar al asesino real. Ford, que es afroestadounidense, fue juzgado por un jurado compuesto exclusivamente por caucásicos.
Cuando salía de la prisión como hombre libre, habló brevemente con los periodistas.
Glenn Ford expresó: “Mi cabeza va en muchas direcciones, pero se siente bien. Estuve encerrado durante más de 30 años por algo que no hice. Cuando me fui, mi hijo era un bebé. Ahora es un hombre con hijos”.
Con 30 años tras las rejas, Ford se convierte en uno de los prisioneros sentenciados a muerte que estuvo recluido durante más tiempo en la historia de Estados Unidos que resultó absuelto y liberado.
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