Y decenas de personas se manifestaron en Chicago frente a un centro clandestino de la policía vinculado al abuso y maltrato de detenidos. El periódico The Guardian reveló la semana pasada que la policía de Chicago utilizó un depósito corriente conocido como Homan Square para llevar a cabo detenciones e interrogatorios. Según trascendió, a los prisioneros se les impedía contactarse con sus abogados, se los golpeaba y mantenía detenidos durante 24 horas sin que quedara registro de su detención. El sábado, un grupo de manifestantes se concentró frente a Homan Square en demanda de que se realice una investigación y se clausure el lugar.
Una manifestante enunció: “Cuando se convierten en agentes, se convierten en funcionarios públicos; no en una extensión del ejército del estado. Nosotros no somos el enemigo”.
Otro manifestante secundó: “Sr. Alcalde, exigimos una investigación inmediata e imparcial en torno a Homan Square. Exigimos que clausure este centro, al menos en lo que respecta a traer acusados aquí. Hay muchos centros de la policía mejor vigilados que este en la ciudad”.
Activistas locales organizaron otra marcha a realizarse el día de hoy en Chicago para exigir compensación para las víctimas de abuso policial de larga data.