En Bolivia, miles de personas se lanzaron a las calles para protestar a causa de la escasez de agua, en medio de la peor sequía que haya azotado al país en más de 25 años. Los manifestantes afirmaron que la escasez, provocada por el cambio climático, se está agravando debido al mal manejo del gobierno y a los proyectos de minería industrial, y exigieron la renuncia del ministro de Medio Ambiente y Agua. Los científicos sostienen que la sequía es producto del retroceso de los glaciares como consecuencia del calentamiento global. Algunos bolivianos han huido del país en busca de agua.
Lisbeth Vogensen declaró: “Personalmente yo no me quería ir de La Paz. Yo estoy viviendo allí hace cuatro años, mi familia y yo somos muy felices ahí, tenemos todo allá. Desgraciadamente esa fue una decisión que tuvimos que tomar por el bien de nuestra familia, por la salud de nuestra familia, y fue en contra de nuestra voluntad. Más bien hemos tenido suerte de que hemos podido viajar acá al Perú, donde todavía hay agua”.