Las autoridades italianas afirman que rescataron a más de 700 personas de embarcaciones cerca de la costa de Libia y recuperaron los cuerpos de otras cuatro. Más de 400 personas murieron en el mar Mediterráneo en lo que va del año al intentar llegar a Europa. Mientras tanto, a lo largo de la frontera entre Grecia y Macedonia la policía antidisturbios retiró por la fuerza a refugiados afganos que estaban protestando en las vías del tren en contra de las políticas que los dejaron varados en el norte de Grecia. Macedonia cerró la frontera a los afganos al reclasificar a los refugiados como migrantes económicos, lo que significa que no pueden obtener asilo político. Una portavoz del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) expresó preocupación por el modo en que Macedonia y otros países están realizando un control selectivo de refugiados en las fronteras.
Karin de Grujil expresó: “En general, nos preocupa el control selectivo de refugiados en las fronteras. Sentimos, consideramos las historias de los refugiados y los solicitantes de asilo deberían considerarse individualmente, a través de los sistemas de asilo y que las personas no deberían ser seleccionadas en función de su nacionalidad, deberían ser seleccionadas en función de si necesitan o no protección internacional, y no es posible hacer eso al seleccionar, al establecer un mecanismo de selección por nacionalidad”.
La Organización Internacional para las Migraciones sostiene que 110.000 personas llegaron a Grecia e Italia este año, un aumento considerable con respecto al año anterior.