En la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas, la gran mayoría de los países se prepara para votar hoy una resolución que se opone a la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald
Trump, de reconocer a Jerusalén como la capital de Israel. Trump lanzó una enardecida campaña de lobby contra la votación, amenazando incluso con cortar el financiamiento de Estados Unidos a los países que voten en contra de su decisión.
El presidente Donald Trump declaró: “Me gusta el mensaje que presentó Nikki [Haley] ayer en Naciones Unidas. Para todos estos países que toman nuestro dinero y piensen votar en nuestra contra en la Asamblea, ellos reciben cientos de millones de dólares, incluso miles de millones, y luego votan en nuestra contra. Bueno, vamos a estar observando esos votos. Que voten en nuestra contra. Vamos a ahorrar un montón. No nos importa”.
El presidente Trump provocó la condena internacional cuando anunció a principios de este mes que Estados Unidos iba a reconocer a Jerusalén como la capital de Israel y que trasladaría allí la embajada de Estados Unidos. El control de Jerusalén es uno de los problemas más polémicos en la región; los palestinos consideran que Jerusalén Oriental es la capital de su futuro Estado. Sigue habiendo protestas permanentes en los territorios palestinos ocupados por Israel, a pesar de la brutal represión militar israelí. El miércoles, decenas de manifestantes palestinos resultaron heridos cuando soldados israelíes abrieron fuego con municiones reales y gas lacrimógeno contra miles de manifestantes. Este es el oficial de Hamas Ismail Radwan.
Ismail Radwan expresó: “Pedimos a nuestras naciones árabes y musulmanas que rodeen las embajadas israelíes y estadounidenses en los países árabes y que expulsen a los embajadores estadounidenses e israelíes de los países árabes. Continuamos con nuestra forma de resistencia, recurriendo a todo tipo de resistencia para invalidar esta decisión”.