La activista climática sueca Greta Thunberg, de 16 años, fue recibida por el papa Francisco en el Vaticano, mientras continúa liderando una campaña para presionar a los líderes europeos a fin de que actúen con urgencia contra el cambio climático. En agosto pasado, Thunberg comenzó una serie de huelgas escolares para iniciar una protesta contra el cambio climático frente al parlamento sueco, que se inició como una tranquila vigilia semanal de una persona y se extendió rápidamente para convertirse en un movimiento de protesta internacional que involucró a cientos de miles de escolares. El martes, Thunberg se dirigió al Parlamento Europeo, donde instó a los legisladores a responder tan urgentemente al cambio climático como lo hicieron el lunes cuando se incendió gran parte de la catedral de Notre Dame de París.
Greta Thunberg: “Ayer, el mundo observaba con desesperación y enorme dolor cómo ardía la [catedral] de Notre Dame en París. Algunos edificios son algo más que edificios. Pero la [catedral de] Notre Dame será reconstruida. Espero que sus cimientos sean sólidos, espero que nuestros cimientos sean aún más fuertes, pero me temo que no lo son”.