Una investigación interna sin precedentes iniciada por el Vaticano encontró que los papas Juan Pablo II y Benedicto XVI conocían y pasaron por alto las acusaciones de abuso sexual contra Theodore McCarrick, el exarzobispo de la ciudad de Washington. El informe de más de 400 páginas detalla el fracaso sistémico de la Iglesia católica en el manejo de acusaciones de conductas sexuales inapropiadas, que en el caso de McCarrick permitió que se mantuviera en la alta jerarquía de la Iglesia durante décadas. McCarrick fue expulsado del Vaticano en el 2019, después de que un juicio de la iglesia lo declarara culpable de abusar sexualmente de menores.
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