Nuevos datos y estadísticas muestran grandes disparidades raciales en las tasas de mortalidad por coronavirus en todo Estados Unidos. En la ciudad de Chicago, el 70% de las muertes por COVID-19 corresponden a residentes afroestadounidenses, a pesar de que representan menos del 30% de la población. En la ciudad de Nueva York, los pacientes con coronavirus en el Bronx —distrito que tiene grandes poblaciones negras y latinas— tienen el doble de probabilidades de morir a causa de la infección que en cualquier otro lugar de la ciudad. Autoridades municipales y de salud pública sostienen que la tasa desproporcionadamente elevada se debe a una mayor cantidad de afecciones de salud subyacentes, como diabetes y asma, y a la falta de acceso a pruebas de diagnóstico y atención médica, así como a condiciones deficientes en viviendas públicas que promueven la propagación de la enfermedad. Nueva Orleans, una ciudad donde la mayoría de la población es negra, registra hasta el momento la tasa de mortalidad por coronavirus más alta de todo el país.
Las comunidades de color de EE.UU. son afectadas en mayor proporción por el coronavirus
Titular06 Abr. 2020