En Massachusetts, la Comisión de Arte de Boston votó el martes a favor de retirar una copia de la escultura llamada “Monumento a la Emancipación” de la exhibición pública. La estatua representa a un hombre esclavizado arrodillado a los pies de Abraham Lincoln. En San Antonio, en el estado de Texas, las autoridades retiraron una estatua de Cristóbal Colón el miércoles. Una estatua similar fue retirada del exterior de la Alcaldía de la capital de Ohio, Columbus, llamada así por el mercenario italiano del siglo XV. En Georgetown, Delaware, las autoridades municipales han retirado un poste de azotes de casi dos metros y medio de alto de la Corte del condado de Sussex. Delaware fue el último estado de Estados Unidos en llevar a cabo flagelaciones públicas, hasta incluso el año 1952, con un número muy desproporcionado de afroestadounidenses que recibieron ese tipo de castigo.
Mientras tanto, el presidente Trump amenazó esta semana con vetar la Ley de Autorización de la Defensa Nacional si incluía una disposición para renombrar Fort Bragg, Fort Lee y otras bases militares que reciben su nombre en honor a líderes confederados. El miércoles, el Departamento de Seguridad Nacional informó que ha creado un grupo de trabajo para proteger monumentos conmemorativos, estatuas e instalaciones federales.