En Europa, España, Francia y Croacia han registrado sus mayores tasas de contagio desde que terminaron las estrictas medidas de confinamiento a principios de este año. Mientras tanto, en Suecia, los funcionarios de salud registraron durante la primera mitad de 2020 el mayor número de muertes en un semestre del país en más de 150 años. Esta semana, varios periodistas recibieron correos electrónicos que mostraban que el principal epidemiólogo de Suecia presionó para mantener abiertas las escuelas para que los niños propagaran la COVID-19 y llevaran a la población a lograr la “inmunidad colectiva”. También le preguntó a un colega si una mayor tasa de mortalidad entre los ancianos podría ser aceptable.
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