En el Reino Unido, activistas por la justicia climática bloquearon más de una docena de centros de distribución de Amazon durante el llamado “viernes negro”, uno de los días de compras más importantes del año, para denunciar al gigante de ventas minoristas en línea por perpetuar el “consumo excesivo y obsesivo”. Estas fueron las palabras expresadas por una activista del grupo ecologista Extinction Rebellion.
Daisy Pearson: “La realidad es que no podemos abordar la crisis del cambio climático sin abordar la cultura de codicia y explotación que en primer lugar nos trajo hasta aquí. La COP26 ya terminó y fracasó porque no fue diseñada para abordar el sistema económico más amplio que depende de este crecimiento económico ilimitado a expensas de nuestros recursos naturales”.
Además, se organizaron huelgas de trabajadores de Amazon en Alemania, Francia e Italia durante el “viernes negro”.
En más noticias laborales, el personal sindicalizado del sitio de reseñas de productos del periódico The New York Times, Wirecutter, inició una huelga de cinco días en vísperas del “viernes negro” y pidió un boicot por parte de los lectores al tiempo que continúan las negociaciones contractuales entre los trabajadores y la dirección de la empresa.