Estados Unidos tiene un promedio diario de 100.000 hospitalizaciones por COVID-19 por primera vez desde el pico alcanzado entre diciembre y enero. Los estados del sureste advierten que se están quedando sin oxígeno para atender a los pacientes, al tiempo que la variante delta, que es altamente contagiosa, continúa propagándose por el país, en especial en las zonas donde hay bajas tasas de vacunación.
Un juez del estado de Florida bloqueó la medida del gobernador Ron DeSantis que prohibía que las escuelas exigieran el uso obligatorio de mascarilla. El juez concluyó que exigir el uso de mascarilla durante la pandemia es “razonable y coherente con las mejores opiniones científicas y médicas de este país”. Por lo menos diez distritos escolares ya estaban desafiando la orden del gobernador DeSantis.
En el estado de California, una maestra que no estaba vacunada y que dio positivo por COVID-19 contagió a la mitad de su clase de 24 estudiantes de primaria después de quitarse la mascarilla para leerles un cuento. El estudio de caso fue publicado por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos y se remonta al mes de mayo. Mientras tanto, un estudio respaldado por las autoridades sanitarias estadounidenses afirma que, sin el uso de mascarilla o pruebas regulares de detección de COVID-19, más del 75% de los menores que no están vacunados podrían contagiarse de coronavirus en los primeros tres meses de clases presenciales. Ante el aumento de los casos infantiles de COVID-19, el doctor Anthony Fauci dijo el domingo que apoya la vacunación obligatoria para todos los alumnos menores de edad, aunque, por ahora, solo los estudiantes de 12 años o más pueden recibir la vacuna.
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