El jueves varias manifestaciones se llevaron a cabo en el Líbano en conmemoración del primer aniversario de una de las explosiones no nucleares más grandes de la historia: la explosión en el puerto de Beirut que dejó al menos 218 personas muertas, 7.000 heridas y que destruyó o produjo importantes daños a 300.000 viviendas. Hasta ahora, no se ha responsabilizado a ningún funcionario ni líder político del país por las más de 2.700 toneladas de fertilizante de nitrato de amonio altamente explosivo que se almacenaban sin las medidas de seguridad correspondientes en el puerto de Beirut. Estas fueron las palabras expresadas por Lea Noun, quien perdió a su primo en la explosión. Noun fue una de las manifestantes que realizaron una vigilia en el lugar de la tragedia.
Lea Noun: “Estamos aquí en este día tan triste para llevar a cabo un levantamiento, no una conmemoración. Hemos venido con el corazón destrozado a honrar a las víctimas, a nuestros mártires y héroes. Mi primo Joe Noun estaba en el depósito número 12 cuando ocurrió la explosión. Nos prometieron que iban a llevar a cabo una investigación de cinco días. Hoy es el día 365 y todavía no ha salido nada de esa investigación”.
Esto se produce al tiempo que el país no cuenta con un Gobierno que pueda hacer frente a la crisis económica y política que vive el país.
Mientras tanto, las fuerzas armadas israelíes informan que dispararon proyectiles de artillería al sur del Líbano, y que luego llevaron a cabo ataques aéreos, después de que combatientes libaneses dispararan cohetes contra el norte de Israel. Los combates provocaron grandes incendios forestales a lo largo de la frontera entre Israel y el Líbano.
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