En el estado de Luisiana, alrededor de un millón de usuarios siguen sin electricidad, al tiempo que algunos residentes comienzan un arduo camino hacia la recuperación después del huracán Ida. Las autoridades dicen que solo algunas partes de la ciudad de Nueva Orleans podrían recuperar el servicio eléctrico antes de la noche de este miércoles. El martes, el gobernador John Bel Edwards les dijo a los evacuados que todavía era demasiado pronto para que consideren regresar a sus hogares.
Gobernador John Bel Edwards: “Faltan muchos de los elementos de la infraestructura de soporte vital, elementos que no funcionan en este momento. Entonces, si a ustedes ya los evacuaron, no regresen aquí, o al sureste de Luisiana, hasta que la Oficina de Preparación para Emergencias les indique que está todo listo para recibirlos. Las escuelas no están abiertas. Los negocios no están abiertos. Los hospitales están desbordados. No habrá agua corriente ni electricidad en su casa”.
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