Altos oficiales militares reconocieron el “fracaso estratégico” de la retirada de las fuerzas armadas estadounidenses de Afganistán después de una guerra fallida de 20 años de duración. Estas fueron las palabras expresadas por el secretario de Defensa, Lloyd Austin, cuando hablaba ante el Comité de Servicios Armados del Senado de Estados Unidos.
Secretario de Defensa Lloyd Austin: “El hecho de que el Ejército afgano, que nosotros y nuestros aliados entrenamos, colapsara, en muchos casos sin disparar un solo tiro, nos tomó a todos por sorpresa. Sería deshonesto afirmar lo contrario”.
Los generales Kenneth McKenzie, jefe del Comando Central de Estados Unidos, y Mark Milley, jefe del Estado Mayor Conjunto, dijeron que habían recomendado mantener una reducida fuerza de 2.500 militares en Afganistán, una aparente contradicción con las declaraciones que hizo el presidente Biden a principios de este año. En respuesta, la Casa Blanca declaró el martes que mantener tropas estadounidenses en Afganistán más allá de la fecha límite de agosto podría haber intensificado la guerra con los talibanes.