En el estado de Colorado, al menos dos personas están desaparecidas, y se presume que fallecieron, después de que un incendio forestal de rápida propagación incinerara los suburbios del condado de Boulder y destruyera al menos 1.000 hogares y comercios. Vientos de hasta 177 kilómetros por hora contribuyeron a avivar los incendios. Este desastre natural culminó un año caracterizado por una sequía excepcional en el oeste de Estados Unidos y se produjo en medio de un mes de diciembre con temperaturas cálidas inusuales para el invierno. Estas fueron las palabras expresadas por Paul Bassis, un residente de la ciudad de Louisville, en Colorado, después de ver los estragos que causó el incendio en su hogar.
Paul Bassis: “El cambio climático está aquí, ahora. Esta no es una amenaza futura con la que tendremos que lidiar algún día, en algún momento, sino que está ocurriendo aquí y ahora. La gente perdió todas sus pertenencias, los recuerdos que estaban en esos hogares, las familias que crecieron allí”.
Haga clic aquí para ver una entrevista en la ciudad de Boulder con la doctora Jennifer Balch, directora del laboratorio Earth Lab de la Universidad de Colorado, sobre este incendio provocado por el cambio climático.
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