El número de muertos por la ola de calor sin precedentes que afecta gran parte de Europa ha superado los 2.000 mientras los meteorólogos advierten que niveles peligrosos de calor se están extendiendo hacia el este del continente. En Grecia, los bomberos tuvieron que combatir casi 400 incendios forestales esta semana, mientras que las temperaturas en algunas regiones de Polonia alcanzaron los 37 grados Celsius.
En Estados Unidos, los meteorólogos pronostican que el calor extremo que afectó al país en los últimos días continuará durante el fin de semana y que el 85% de los estadounidenses sufrirán temperaturas máximas mayores a 32 grados Celsius.
Unas impactantes imágenes satelitales de la NASA muestran que el embalse más grande de Estados Unidos, el lago Mead, se encuentra en su nivel más bajo desde que finalizó la construcción de la represa Hoover en la década de 1930. El embalse del lago Mead abastece de agua a unos 25 millones de personas.