En Francia, más de un millón de personas marcharon el jueves por las calles de ciudades como París, Marsella y Niza, mientras los sindicatos realizaban una huelga nacional contra los planes del presidente Emmanuel Macron de elevar la edad de jubilación de 62 a 64 años. En París, más de 30 personas fueron detenidas después de que la policía lanzara gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes que se habían congregado en la plaza de la Bastilla. Estas fueron las palabras expresadas por el dirigente sindical Laurent Escure.
Laurent Escure: “Queremos tener una buena jubilación. No queremos jubilarnos cuando ya estamos caídos y cansados. Queremos disfrutar de nuestros últimos años con nuestros hijos, con nuestros nietos y, quizás, con nuestros padres, a los que tenemos que cuidar. Así que lo que queremos hoy es un mensaje de justicia social. Si el Gobierno no entra en razón, habrá más huelgas. Por eso pedimos que se escuche la voz de la razón y que no se tomen medidas irresponsables”.