El senador Bernie Sanders celebró el martes una audiencia para pedir el fortalecimiento de las protecciones sindicales en medio de una ola de victorias laborales y la persistente desigualdad que existe en el ámbito laboral en Estados Unidos. Sanders instó al Congreso a aprobar la Ley PRO, la cual reintrodujo a principios de 2023.
El presidente de United Auto Workers, Shawn Fain, quien recientemente levantó la exitosa huelga que su sindicato llevó a cabo contra los tres mayores fabricantes de automóviles de Estados Unidos, pidió al Congreso que “diera un paso adelante” en favor de la clase trabajadora.
La presidenta del sindicato Asociación de Auxiliares de Vuelo, Sara Nelson, habló sobre la importancia de que todos los trabajadores de aerolíneas y aeropuertos tengan un salario digno.
Sara Nelson: “Hay trabajadores que no tienen un salario digno y que, de hecho, duermen en las áreas de espera porque trabajan las 24 horas del día, turnos de 24 horas, y a veces, tienen diferentes trabajos en ese aeropuerto. Esto hace que todos estemos menos seguros. Tampoco pueden vivir cerca de esos aeropuertos porque, por lo general, se encuentran en las principales áreas metropolitanas, y, a veces, demoran tres horas de ida al trabajo y de regreso a sus casas si toman el transporte [público], por lo que ni siquiera tienen tiempo para volver a sus casas entre los [diferentes] turnos. Así que tenemos que elevar el estándar para todos los trabajadores. Se trata de evitar accidentes. Esto se trata de seguridad. Y se trata de tener dignidad básica en el lugar de trabajo”.
Sin embargo, el senador republicano Markwayne Mullin fue protagonista del momento más impactante de la audiencia, cuando reavivó una disputa actual con el presidente del sindicato de camioneros Teamsters, Sean O’Brien, y lo desafió a pelear.
Senador Markwayne Mullin: “Este es el momento. Este es el lugar. Si no va a dejar de hablar, podemos ser dos personas adultas. Podemos resolverlo aquí”.
Sean O’Brien: “Está bien, está bien. Perfecto”.
Senador Markwayne Mullin: “¿Quiere hacerlo ahora?”.
Sean O’Brien: “Me encantaría hacerlo ahora mismo”.
Senador Markwayne Mullin: “Bueno, entonces párese”.
Sean O’Brien: “Párese, grandulón”.
Senador Bernie Sanders: “Esperen. No. Basta. Ya fue suficiente, esperen”.
Sean O’Brien: “¿Es esa su solución para todos los problemas?”.
Senador Bernie Sanders: “Oh no, siéntese. Siéntese. No, no, usted es senador de Estados Unidos”.
Tras ordenar a Mullin que se sentara, el senador Sanders añadió: “Dios sabe cómo el pueblo estadounidense desprecia al Congreso. No lo empeoremos”.