Naciones Unidas ha pedido que se despliegue una “fuerza de apoyo especializada” internacional en Haití para frenar el agravamiento de la violencia de los grupos criminales, que ya ha causado la muerte de más de 530 personas en lo que va de 2023. La violencia de los grupos criminales no ha dejado de aumentar en medio de la creciente inestabilidad política y económica que se generó en Haití tras el asesinato del presidente Jovenel Moïse en 2021. Los grupos criminales controlan actualmente más de la mitad del país, mientras que unas 160.000 personas se han visto obligadas a abandonar sus hogares y muchas de ellas viven en viviendas improvisadas.
Natacha Germain: “Los grupos criminales nos invadieron. Perdí a mi marido a causa de las guerras entre grupos criminales. Estoy sola con mis hijos. Vivía en la calle y, después de muchas búsquedas, encontraron este lugar para que nos quedáramos. Ahora no puedo volver a casa. He perdido todo”.
La mitad de la población de Haití no tiene suficiente comida. La ONU advierte que los menores de edad están especialmente expuestos a la violencia de los grupos criminales y se enfrentan a secuestros, reclutamientos forzosos y actos de violencia sexual.