El Departamento de Correcciones y Supervisión Comunitaria de Nueva York anuncia que dejará de informar sobre las muertes que ocurren en la cárcel de Rikers Island

En Estados Unidos, un organismo de supervisión federal ha iniciado una investigación sobre la muerte de Joshua Valles, de 31 años, y otros sucesos “perturbadores” ocurridos en el complejo carcelario de Rikers Island de la ciudad de Nueva York. Una autopsia reveló que Valles murió a causa de una fractura de cráneo, lo que parece contradecir los informes brindados por las autoridades penitenciarias. El organismo también acusó a la cárcel municipal de falta de transparencia. Mientras tanto, el Departamento de Correcciones y Supervisión Comunitaria de Nueva York afirmó que dejará de notificar a la prensa cuando un recluso muera en una de sus instalaciones. La Sociedad de Asistencia Legal declaró al respecto: “Este es otro punto bajo en la campaña del Departamento de Correcciones de Nueva York para que no se conozca acerca de las condiciones deplorables del sistema carcelario de la ciudad y el daño que inflige a diario a los neoyorquinos que están recluidos en ese sombrío lugar”.