La asamblea legislativa del estado de Tennessee, órgano actualmente controlado por los republicanos, pospuso la audiencia del jueves luego de que se llevara a cabo esta semana una agitada sesión especial sobre armas de fuego y seguridad pública. Esto ocurre en medio de la creciente indignación que se desató tras el tiroteo que se produjo en la escuela Covenant de la ciudad de Nashville a principios de 2023, en el que murieron tres escolares y tres adultos. Cientos de manifestantes se han congregado esta semana en el Capitolio para exigir a los legisladores que tomen medidas contra la violencia con armas de fuego.
El martes, un dirigente republicano ordenó a los policías estatales que sacaran de una audiencia legislativa a las personas que esperaban para declarar, lo que provocó caos y emociones intensas en la sala. El lunes, los republicanos impusieron nuevas sanciones a los legisladores que consideran demasiado conflictivos y prohibieron al público llevar pancartas. Los ciudadanos eludieron la nueva normativa mostrando palabras en sus teléfonos celulares. Asimismo, una jueza suspendió temporalmente el miércoles la prohibición de pancartas.
Por otro lado, el legislador demócrata de Tennessee Justin Jones, uno de los “tres de Tennessee”, fue interrumpido en una sesión de la Cámara de Representantes del estado tras acusar de racista al presidente republicano de dicha cámara por las nuevas normas impuestas. A principios de 2023, Justin Jones había sido expulsado, junto con Justin Pearson, de la Cámara de Representantes de Tennessee por protestar en el Capitolio estatal contra la violencia con armas de fuego; sin embargo, luego volvió a ocupar su puesto tras ser reelegido por los votantes.
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