En Estados Unidos, los incendios forestales que arden en el suroeste del estado de Luisiana se han cobrado la vida de dos personas y, hasta el martes, ya habían arrasado más de 24.000 hectáreas. El gobernador John Bel Edwards declaró que estos incendios son los peores que ha sufrido Luisiana “al menos desde la Segunda Guerra Mundial”, en medio de una sequía sin precedentes.
Mientras tanto, en la isla hawaiana de Maui, se dio por concluida la búsqueda de víctimas del incendio forestal en tierra, y los esfuerzos de búsqueda ahora se trasladan al océano. El número oficial de víctimas fatales asciende a 115 personas.