Organizaciones indígenas de todo Brasil protestaron el miércoles en la ciudad de Brasilia al tiempo que el Supremo Tribunal Federal del país reanudaba las audiencias de un caso crucial que podría privar a los indígenas de sus derechos sobre los territorios ancestrales. El caso está siendo impulsado por legisladores respaldados por la agroindustria, que argumentan que los grupos nativos sólo tienen derecho a las tierras que ocupaban físicamente en 1988, año en que se firmó la Constitución actual de Brasil. Muchas comunidades indígenas fueron expulsadas de sus territorios ancestrales a lo largo de los años, incluso durante la dictadura militar. Estas fueron las palabras expresadas por la presidenta de la Comisión Nacional para la Defensa de los Derechos de los Pueblos Indígenas, Joenia Wapichana, quien además es miembro de la tribu Wapichana .
Joenia Wapichana: “Existe una Constitución, y hay que respetarla. Así que, en esa línea, esperamos que el Supremo Tribunal Federal haga justicia con las vidas de los pueblos indígenas y proteja las tierras indígenas tanto para los pueblos originarios como para todos los seres vivos”.
De ser aprobada, la medida podría tener consecuencias nefastas no sólo para los pueblos indígenas de Brasil, sino para la conservación de la Amazonia y de todo el planeta.
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