Las fuerzas armadas israelíes lanzaron una nueva serie de ataques contra la antigua ciudad libanesa de Baalbek, que ha sido declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, donde mataron al menos a 19 personas. Los ataques se produjeron apenas horas después de que decenas de miles de personas huyeran de la zona debido a las órdenes de evacuación forzada que había emitido Israel.
A pesar del creciente número de muertes, el primer ministro interino del Líbano, Najib Mikati, dice que espera que se anuncie un acuerdo de alto el fuego en los próximos días. Esto se produce al tiempo que el enviado de Estados Unidos Amos Hochstein está en Jerusalén para participar en conversaciones que tienen como finalidad que se llegue a un acuerdo de alto el fuego en el Líbano.
Mientras tanto, el nuevo jefe del Hizbulá, Naim Qassem, dijo que, si bien el grupo está preparado para seguir luchando contra Israel, este está abierto a la posibilidad de que se establezca un alto el fuego. Qassem, que reemplaza al asesinado líder de Hizbulá Hassan Nasrallah también habló sobre la guerra de Israel en Gaza.
Naim Qassem: “El pueblo de Gaza tiene derecho a que lo apoyemos, y todos deben apoyarlo. El pueblo de Gaza tiene un derecho humano, un derecho árabe, un derecho islámico, un derecho religioso y un derecho nacional. No deberían preguntarnos por qué los apoyamos. Más bien, habría que preguntar a los demás: '¿Por qué no apoyaron al pueblo de Gaza?'”.