El expresidente de Filipinas Rodrigo Duterte admitió bajo juramento que cuando era alcalde de la ciudad sureña de Davao tenía un “escuadrón de la muerte” compuesto por “gánsteres” para atacar a personas. Duterte hizo esta confesión el lunes durante su comparecencia ante una comisión del Senado de Filipinas que investiga la gran cantidad de ejecuciones extrajudiciales que la policía y miembros de una patrulla civil armada llevaron a cabo en el marco de la llamada “guerra contra las drogas” de Duterte.
Rodrigo Duterte: “Tenía un escuadrón de la muerte. Un escuadrón de la muerte conformado por siete personas. Pero no eran policías. Eran gánsteres. Yo le ordenaba a uno de ellos: 'Mata a esa persona, porque si no, te mataré a ti'”.
Un informe de las Naciones Unidas ha revelado que al menos 8.600 personas murieron en la guerra contra el narcotráfico liderada por Duterte, aunque algunas estimaciones sugieren que la cifra real podría ser tres veces mayor. La Corte Penal Internacional, cuya sede se encuentra en La Haya, está investigando a Duterte por posibles “crímenes de lesa humanidad” cometidos bajo su mandato.