En la República Democrática del Congo, decenas de miles de personas siguen huyendo de los actos de violencia que azotan el este del país al tiempo que los combatientes del grupo rebelde M23 avanzan hacia Goma, la capital de la provincia Kivu del Norte. Según se informa, el M23, que ha sido acusado de tener vínculos con Ruanda, rodeó la ciudad de Sake, la cual es considerada la última línea de defensa antes de llegar a Goma. Muchas personas del este del país se han visto obligadas a huir varias veces en medio de los crecientes actos de violencia que unos 120 grupos armados que operan en la región están llevando a cabo. Estas fueron las palabras expresadas por una persona que ha tenido que desplazarse a otras partes del país.
Elisabeth Rebecca: “Hubo muchos disparos en mi localidad. El M23 llegó quemando las casas. Nos obligaron a darles todo el dinero. Algunos de nosotros incluso perdimos a nuestros hijos. Hubo muchos muertos y heridos. Cuando entraban a una casa se llevaban todo, mataban gente y se llevaban el ganado. Eso es lo que nos hizo huir de nuestro hogar hasta aquí, hasta Sake. A principios de la semana pasada huimos de la localidad de Shinga a la localidad de Kirotshe, y fue el domingo cuando salimos de Kirotshe para venir aquí”.
Durante un partido de fútbol que se jugó esta semana como parte de la Copa Africana de Naciones, el equipo nacional de la República Democrática del Congo intentó llamar la atención sobre el enorme desastre humanitario que enfrenta su país y que es ignorado a nivel mundial. Mientras se entonaba el himno nacional de la República Democrática del Congo, los jugadores se taparon la boca con una mano y se señalaron la sien con dos dedos.