El Gobierno de Trump publicó el martes sus informes anuales sobre los derechos humanos en el mundo. Dichos informes no incluyeron secciones enteras sobre violaciones contra los derechos humanos, incluida la violencia de género, los ataques contra la comunidad LGBTQ+ y los derechos de las mujeres, y la discriminación por motivos raciales o étnicos. Varios de los informes actualizados omiten evidencias de actos de violencia cometidos en países cuyos líderes son aliados de Donald Trump.
El informe de Estados Unidos sobre Israel, que fue recortado en más del 80%, no incluye casi ninguna crítica al Gobierno israelí, así como tampoco hace mención a la catástrofe humanitaria que está causando el bloqueo de Israel al ingreso de ayuda humanitaria a Gaza.
El informe sobre Hungría no incluye la corrupción gubernamental generalizada ni la represión contra la comunidad LGBTQ+ que azota el país, en su lugar, este concluye: “No hubo informes creíbles de violaciones significativas contra los derechos humanos”. Esa es la misma conclusión que figura en el resumen ejecutivo del informe de 2024 sobre
El Salvador, que ha sido recortado en un 66% y ya no menciona los actos de violencia que han sido utilizados por muchos solicitantes de asilo como prueba para sus casos. A diferencia del informe de 2024, el informe de derechos humanos de 2023 sobre El Salvador, que fue redactado por el Departamento de Estado del Gobierno de Biden, menciona ejecuciones arbitrarias, desapariciones forzadas, torturas, condiciones carcelarias que ponen en riesgo la vida de las personas, ataques a la independencia del Poder Judicial del país y violencia de género generalizada, entre otras cosas.
El martes, la portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, defendió los cambios implementados.
Tammy Bruce: “No íbamos a publicar algo compilado que redactó el Gobierno anterior. Esto tenía que cambiar, en base al punto de vista y la visión del Gobierno de Trump”.
Mientras tanto, el informe actualizado sobre Sudáfrica alega el maltrato a los agricultores blancos afrikáners, mientras que el informe sobre los derechos humanos de Brasil critica el proceso judicial que enfrenta el aliado de Trump y expresidente brasileño Jair Bolsonaro por intentar perpetrar un golpe de Estado.