En declaraciones en la Casa Blanca, el Presidente Barack Obama instó a un “examen de conciencia” nacional sobre el control de armas. También calificó la inacción del Congreso como una “vergüenza”.
Obama expresó: “No es el único país que cuenta con psicosis y, sin embargo, nos matamos unos a otros en estos tiroteos en masa con una proporción exponencialmente más alta que en cualquier otro lugar. El país tiene que hacer un examen de conciencia sobre esto. Esto se está convirtiendo en la norma y lo estamos dando por sentado de una forma que, como padre, es aterradora para mí. Y estoy preparado para trabajar con cualquier persona, como deportistas responsables y propietarios de armas, para crear algunas soluciones, pero en este momento ni siquiera es posible obtener las restricciones más leves en el Congreso. Deberíamos avergonzarnos de eso”.
En medio de una serie de tiroteos mortales, el Presidente de la mayoría del Senado, Harry Reid, dijo que el Senado podría revivir la votación sobre la medida fallida para ampliar los controles de antecedentes y prohibir los rifles de asalto. La medida fue introducida después de la masacre de Newtown, pero se derrumbó en el Senado, cumpliéndose un año de ello el pasado mes de abril.