La candidata presidencial 2016 por el Partido Demócrata, Hillary Clinton, lidera el voto popular por cientos de miles de votos, pero perdió en el Colegio Electoral frente al republicano Donald Trump. La última vez que hubo este tipo de resultado fue en el año 2000, en la carrera por la presidencia entre Bush y Gore. Mientras tanto, se están empezando a formular iniciativas de reforma electoral para lograr que los estados adopten la Ley Nacional del Voto Popular. El proyecto podría transformar el modo de elegir el presidente de Estados Unidos. Conforme a un acuerdo por el voto popular a nivel nacional, un grupo de estados de todo el país han prometido otorgar los votos electorales al candidato presidencial que gane el voto popular. Si se reúne una cantidad suficiente de estados que se adhieran a la iniciativa se garantizaría que la presidencia recaiga en el candidato que obtenga la mayor cantidad de votos en todo el país. El acuerdo entrará en vigencia solo cuando haya firmado una cantidad de estados suficiente para conseguir el mínimo necesario de 270 votos del colegio electoral.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos (en inglés) a John Koza, titular de la iniciativa National Popular Vote.