El gobierno australiano afirma que va a cerrar el centro de detención de migrantes de la isla de Manus tras los informes de las duras condiciones y el abuso predominante en el lugar, también hacia los niños detenidos. Manus es uno de los dos centros de detención en alta mar que tiene Australia para los migrantes que solicitan asilo. Muchas de las personas que se encuentran en este centro han pasado años detenidas y sufren de problemas de salud mental. El gobierno australiano ha dicho hasta ahora que ninguno de los detenidos en Manus será asentado en Australia, pero Colin Barnett, primer ministro de Australia Occidental, dijo que los recibiría para su reasentamiento.
Colin Barnett expresó: “En particular a las familias, siempre y cuando no supongan un riesgo para la seguridad, yo les doy la bienvenida para que estén en Australia. Lo único que me parece inaceptable es que haya niños detenidos”.