El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, repitió el jueves su llamado a armar a los docentes estadounidenses con armas de fuego ocultas, y afirmó que estaba preparado para buscar fondos para un programa para procurar que hasta el 40% del personal escolar estadounidense fuera entrenado para portar armas.
El presidente Trump expresó: “A las personas que porten [armas] les daremos una bonificación, les daremos una pequeña bonificación, francamente se sentirán más cómodas teniendo el arma de todos modos, pero les daremos una pequeña bonificación”.
La propuesta de Trump provocó la crítica inmediata de los docentes y sus sindicatos. Randi Weingarten, presidenta de la Federación Estadounidense de Docentes, calificó la idea del presidente Trump de “terrible”.
Randi Weingarten sostuvo: “Este es el hombre que recortó 9.000 millones de dólares del presupuesto federal para las escuelas, que recortó todos los programas escolares de verano, que recortó todos los programas extraescolares, que recortó programas de arte y música. Y, francamente, dos días antes de la masacre en Parkland recortó medidas de seguridad y medidas de salud mental. Las únicas personas que obtendrán ayuda de los docentes armados son los fabricantes de armas y la Asociación Nacional del Rifle, que desean aumentar la venta de armas”.